El once bluff de la Eurocopa

Los grandes han sobresalido y se han llevado portadas y titulares. Pero hay que recordar quiénes han decepcionado en esta Eurocopa, bien sea por las altas expectativas puestas en ellos o porque directamente no tienen nivel internacional. Voy a ser duro. Si eres sensible y uno de tus jugadores favoritos es susceptible de estar en mi lista, no leas. Va a ser un 4-4-2. Ahí vamos.

Ricardo: Es el portero que más ha fallado. En dura pugna con Rustu y Lehmann, él no ha tenido una actuación sublime en la Eurocopa. Sus salidas a por uvas contra Klose y Podolski son dignas de recordar. Si la portería no fuese un auténtico agujero negro, Portugal hubiera estado en semifinales, y posiblemente en la final. Si yo fuera Lopera, me lo plantearía.

Friedrich: El lateral más limitado de la Eurocopa. Le han bailado todos los que por su banda han entrado en este mes de competición. No tiene salida de balón, da malas entregas en corto comprometiendo en ocasiones a Mertesacker y Schweinsteiger... Ha sido uno de los flancos para batir a Alemania.

Thuram. Qué decir del ex barcelonista. Hay formas y formas de terminar tu carrera internacional. Tiene 142 partidos con la 'bleu', muy bonito. Queda precioso para los libros, pero reza porque no haya un investigador que quiera saber cómo fueron sus últimos partidos con la Selección. Calamitoso de principio a fin.

Bak. El defensa polaco cree que porque su seleccionador sea holandés tiene licencia para jugar en la línea del centro del campo. Normalmente los entrenadores se cuidan de no darle ni un metro a Podolski. Él le dio cincuenta. Para él solito. Por muy polaco que sea, Podolski no es tonto. Si esa fue la intención de Bak, se merece un auténtico reconocimiento.

Lahm. Sus dos últimos partidos lo elevan a la categoría de pastel (Gracias a Sergio Díaz por inspirarme el término). Que le hagan sendos autopases que terminen en gol Sabri y Torres da que pensar. A lo mejor no eres tan rápido como se pensaba. Y si no eres rápido, ni eres alto... ¿qué haces vistiendo la camiseta alemana? Háztelo mirar Philip.

Ljungberg. Tierra llamando al capitán sueco. Se lleva mal con Mellberg e Ibrahimovic, ha perdido forma física y ni siquiera le sientan bien los calzoncillos ya. No ha dado pie con bola en los tres partidos que ha jugado su Selección. Desde luego, eso de jugar con diez desde el principio se nota. No te ancles en el pasado, ex capitán.

Fernandes. El caboverdiano suizo ha sido el gran bluff en esta Eurocopa. No porque se esperaba más de él, sino porque se ha escondido cual conejito acojonado en su madriguera. Así, Suiza estaba partida en dos y ha sido gracias a él que Suiza ha dado la peor imagen de las dos co-anfitrionas. O mejoras o no hueles la roja de tu país.

Toulalan. Por posición, ha sido el relevo de Vieira. Makelele se ha retirado de la 'Bleu' maldiciendo su figura. ¿Cómo es posible que le hayan puesto un compañero 10 centímetros más bajito y 10 kilos más delgado? El bajito y delgado de la pareja de pivotes es Maka, y no hay que poner a otro canijo a su lado, que además no tiene ni idea de cortar balones por lo que nos ha demostrado en esta Eurocopa.

Ronaldo. En las grandes citas siempre se llama a su puerta para que haga una filigrana o algo que despierte a la afición. Contra Alemania hizo una y su equipo marcó, pero no se dio cuenta de que Alemania ya llevaba tres goles a favor. Sigue buscando el contrato de tu vida, total, el partido de tu vida puede esperar a cuando estés podrido en dinero y pierdas el amor por el balón.

Gómez. Nivel Guadix. Puede volver a la Segunda B andaluza, porque las supuestas credenciales que había atesorado en el Stuttgart no han aparecido en toda la Eurocopa. Muy alto, muy guapo, muy alemán... (ah, no, que este es moreno). Pero no sirve para nada. Para el recuerdo quedará su gol fallado ante Austria a menos de un metro de la línea de gol. Maravilloso y difícil al mismo tiempo.

Henry. Decir que fue la sombra de sí mismo sería demasiado benévolo para el barcelonista. Oscuro de principio a fin, marcó los mismos goles a favor que en contra. Eso sí, el gol en su propia portería con un toque elegante y sutil marca TH. Si tienes que descansar un año, hazlo, pero no nos hagas sufrir viendo ese nombre en la camiseta cuando realmente dentro va un guiñapo de lo que fuiste.