La final más difícil

Una vez más se ha conseguido. Una selección inferior española ha conseguido hacer un gran papel en un Mundial. En esta ocasión le ha tocado a la generación del 90. Santisteban es todo un maestro (Una pena que se retire el domingo) y ha entrenado, enseñado y educado a multitud de jóvenes españoles que podrán haber salido adelante en el fútbol o no.

De estos pequeños héroes no todos llegarán a la elite, algunos se pondrán a estudiar, otros no los cogerán en sus equipos, etc. Sin embargo, el domingo todos pendientes de ellos más que de Alonso porque lo que han hecho es muy muy grande.

El problema es sabido por todos: tras la expulsión de Bojan por parte de un pésimo árbitro (En los dos sentidos y luego lo explico) y el cansancio acumulado tras dos prórrogas ante selecciones muy potentes físicamente como Francia y Ghana, llegan las "Aguilitas doradas" de Nigeria, que son los teóricos favoritos por su condición física y por tener un auténtico killer del área con el nombre de Chrisantus en la espalda (7 goles en 7 partidos).

Volviendo al tema del árbitro, no solo lo hizo mal en la expulsión de Bojan. Aparte, el 9 de la Selección sufrió multitud de patadas sin sanción y él vio dos amarillas por minucias en comparación con los métodos de los ghaneses para frenarle. Pero el motivo principal por el que es malo el árbitro es porque había dos cracks en el campo: Adams y Bojan. Pues bien, llegara el equipo que llegara a la final, ninguno de los dos equipos podría haber alineado a su estrella, pues Adams también fue sancionado con una tarjeta amarilla que le priva del siguiente partido. Esto es inadmisible. ¿Os imagináis la final de Francia-98 sin Zidane? ¿O la de Estados Unidos -94 sin Romario ni Baggio? Aunque bueno, en la de Corea-Japón 2002 ya faltó Ballack, así que no sé de qué me extraño.

Si la selección quiere ganar el domingo, deberá encomendarse no solo a De Gea, todo un descubrimiento bajo palos, ni a Mérida, que como dirían en Argentina, aún es un jugador lagunero, intermitente. La clave va a ser el doble pivote. Camacho parte como titular fijo, pero necesita un compañero que le guarde bien las espaldas. Para ello se necesita al mejor Ximo o al mejor Illarra, pero ninguno de los dos está respondiendo fiablemente y en la semifinal fueron suplentes. En un caso extremo, alinear un trivote Ximo - Camacho - Illarra sería una buenísima opción, ya que los nigerianos son muy parecidos a los ghaneses, y como disparen entre palos, gol (Que se lo pregunten a De Gea ante el tiro de Adams).

Luego la mejor opción en bandas sería volcar a la izquierda a Mérida y en la derecha las entradas de Iago y guardarse el revulsivo de López en el banquillo por si acaso. Arriba, claro está, el Torito Aquino que tiene que despedirse con otro golito dedicado a la cámara del estadio de Seúl.